Me confieso fan de Filter Forge y es que ya he hablado más de una vez sobre este maravilloso añadido para Photoshop que permite crear patrones y texturas de una calidad majestuosa. Que digo majestuosa… tremebunda. Si no lo habéis probado hasta ahora, echarle un vistazo. De verdad que merece la pena. Quizá no para el día a día (aunque todo dependerá de nuestro trabajo) pero puede ayudar a la hora de crear imágenes de la nada y efectos muy muy resultones.
Pues bien, ha llegado a la tercera versión con un buen puñado de novedades entre las que destacar la mejoría en los tiempos de preview y render. Y es que todo tiene que tener un precio (además del económico) y es la lentitud con la que se generan las previsualizaciones y los posteriores renders finales de los filtros. Más aún teniendo en cuenta que la única versión que soporta multihilo es la más cara de todas.
En cualquier caso, ya digo que deberíais pegarle un vistazo a la demo y juguetear un poco con ella. Tras el extinto imageSynth, este plugin me parece un imprescindible para los que gusten de trastear con patrones y efectos.