Si destacaba recientemente el trabajo de Laura Pérez, hoy me toca hacer lo mismo con el de Lydia Sánchez. Con un poco de suerte se entera de la reseña porque tengo la suerte de contarla entre los lectores de este rinconcito 🙂
No creo que sea casualidad que termine metiendo en mi bolsa de favoritos a ilustradoras que hacen gala en sus piezas de tal «poderío colorimétrico». Esa vivacidad en los colores y el positivimos que transmiten… me pueden.
La descubrí hace ya bastante tiempo, creo que pululando por los foros de Domestika. Y ahora, que parece que he cogido un poco de carrerilla para quitarle las telarañas al blog, era un momento perfecto para rendirle un humilde homenaje. Ojito con todos los «cacharritos» de su tienda: que si tazas y platos, macetas ilustradas… estas Navidades casi me traigo algunos para casa!
Hola!!
Acabo de descubrir esta publicación y me ha hecho mucha ilusión, ¡muchas gracias!
Si no la he leído antes es porque soy súper despistada, jaja.
Un saludo! 🙂
Bienvenida Lydia y gracias por dejarte caer por aquí 🙂